sábado, 8 de junio de 2013

Un día inolvidable de lucha y unidad


Fotos: Diego Pintos 

El 7 de junio los periodistas festejamos nuestro día con una jornada histórica e inolvidable para todo el gremio de prensa. Después de 27 años, volvimos a realizar un paro general en el marco de nuestra lucha por las Paritarias de Prensa en las que reclamamos que las patronales finalicen con años de precarización laboral y accedan a pagarnos salarios justos. 

Compañeros de diarios, revistas, agencias nacionales e internacionales y punto.com nos concentramos en el Obelisco frente a las puertas de AEDBA -cámara empresaria liderada por Clarín y La Nación- y realizamos un multitudinario acto.

Cortamos la 9 de julio, desplegamos nuestras banderas y cantamos por nuestras reivindicaciones que siguen en pie: 35% de aumento; $1800 de anticipo; $7000 pesos de Mínimo; $1000 por colaboración y pase a planta de colaboradores; $1500 de guardería y 2% por año de antigüedad. 

Con una columna de entre 1200 y 1500 compañeros, emprendimos la marcha por avenida Corrientes hacia el edificio del diario La Nación. Allí, con fuerza y empuje, colmamos el hall central del diario que es "tribuna de doctrina" y les dejamos en claro a los empresarios que no vamos a retroceder en lo que consideramos justo. 

No vamos a aceptar porcentajes de aumento que no se apliquen al salario de bolsillo, ni tampoco el miserable piso de 150 pesos que ofertaron para colaboradores. Tampoco dejaremos pasar que argumenten que un colaborador con menos de 24 notas anuales, no es periodista. Ellos, precarizan, nosotros nos defendemos!     

Más tarde, continuamos nuestro recorrido: pasamos por las puertas del diario La Prensa y llegamos a las de Atlántida-Televisa para gritarle bien fuerte a AAER, la cámara que agrupa a las revistas, que no vamos a aceptar escalas diferenciadas en esta paritaria. 

El último destino de nuestro día de lucha fue la puerta del diario Ámbito Financiero, medio perteneciente a AFERA, otras de las cámaras empresarias involucradas en las negociaciones que estamos llevando a cabo en el Ministerio de Trabajo. 

Cansados y con el corazón contento nos separamos, sabiendo que la lucha no finaliza acá. Estamos marcando una nueva era en el gremio de prensa, de solidaridad y unidad, y no vamos a volver atrás.  




























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